loader image

La cerámica de la antigua Grecia

 

La cerámica de la Antigua Grecia nos ayuda a conocer la vida y las creencias de una de las grandes culturas del pasado. Los alfareros griegos buscaban crear piezas de cerámica de uso práctico: para contener vino, agua, aceite o perfumes.

Formas de cerámica

 

Existían vasijas de 𝗮𝗹𝗺𝗮𝗰𝗲𝗻𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝘆 𝘁𝗿𝗮𝗻𝘀𝗽𝗼𝗿𝘁𝗲, de cuerpos grandes y asas fuertes, como las 𝘢́𝘯f𝘰𝘳𝘢𝘴, 𝘱𝘦𝘭𝘪𝘬𝘦𝘴, 𝘩𝘺𝘥𝘳𝘪𝘢𝘴 𝘰 𝘱𝘺𝘹𝘪𝘴. Una pelike era una vasija de medianas proporciones con dos asas verticales enfrentadas que se extendían desde la boca hasta el inicio del cuerpo, de boca ancha y máximo diámetro situado en la zona inferior del cuerpo casi esférico. Estos recipientes se empleaban para contener vino o agua.

Los pyxis eran recipientes de cerámica en forma de caja cilíndrica, con tapadera pero sin asas y que se empleaban para contener ungüentos, cosméticos, abalorios o joyería.

 

 

 

 

 

 

Pelike de figuras rojas atribuida al Pintor de Creusa, 390 a.C.. 34 x 23 cm. Procedencia: Colección Ex Peter Connor, Australia. Adquirido en 1979 / Adquirido en Bonhams, Londres, Subasta, 2008

 

Por otro lado, también podemos encontrar 𝘃𝗮𝘀𝗶𝗷𝗮𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗺𝗲𝘇𝗰𝗹𝗮𝗿, que solían tener la forma de grandes cuencos, sin asas ni pies, y que se empleaban, sobre todo en las fiestas masculinas, para beber (𝘬𝘳𝘢𝘵𝘦𝘳, 𝘋𝘪𝘯𝘰𝘴). La cerámica campana es la cerámica de figuras rojas producida en Campania, a partir del 380 a. C. y donde Los temas más representados eran los mitológicos, dionisíacos y funerarios.

La arcilla marrón claro de Campania se cubría con un engobe que adquiría un tinte rosa o rojo tras la cocción. Los pintores campanos preferían los tipos de vasos más pequeños, pero también las hidrias y las cráteras de campana.

La crátera de campana era un tipo de crátera, o cuenco para mezclar vino y agua, que toma su nombre del parecido de su forma con una campana invertida con asas de lazo y un pie de disco.

 

Crátera de campana de figuras rojas y con escena dionisíaca, 400 a.C. 26,5 x 25 cm

Otro estilo famoso de cerámica son las 𝗷𝗮𝗿𝗿𝗮𝘀 𝘆 𝗰𝗼𝗽𝗮𝘀, que disponían de asas largas para que fueran más fáciles de tomar cuando se estaba recostado (𝘬𝘢𝘯𝘵𝘩𝘢𝘳𝘰𝘴, 𝘱𝘩𝘪𝘢𝘭𝘦, 𝘴𝘬𝘺𝘱𝘩𝘰𝘴 𝘰 𝘰𝘪𝘯𝘰𝘤𝘩𝘰𝘦).

Los kantharos eran recipientes para beber en la antigua Grecia y que estaban asociados con el dios Dionisio, cuya copa, según la mitología, nunca debía estar vacía. La vasija en forma de copa estaba unida verticalmente a dos asas opuestas, ampliamente curvadas y elevadas, por las que se sostenía con ambas manos mientras se bebía. El pintor de Sakkos Blanco, que trabajaba en una de las colonias griegas de la región de Apulia, en el sur de Italia, probablemente en Canosa, decoró vasos con la técnica de la figura roja a finales del siglo IV.

 

 

 

 

Kantharos apuliano de figuras rojas atribuido al pintor Sakkos Blanco, 310 a.C. 28,5 x 23 cm. Procedencia: Daaf De haan 1984 Ámsterdam, Países Bajos. Adquirido por Cree Holt 2005 Liverpool, Reino Unido. Julie Lemaire adquirida por el propietario anterior en 2012 Bruselas, Bélgica.

 

Por último, aquellas vasijas que se usaban para 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗮𝗰𝗲𝗶𝘁𝗲𝘀, 𝗽𝗲𝗿𝗳𝘂𝗺𝗲𝘀 𝗼 𝗰𝗼𝘀𝗺𝗲́𝘁𝗶𝗰𝗼𝘀, que contaban con cuellos largos y no tenían asas (𝘭𝘦𝘬𝘺𝘵𝘩𝘰𝘴, 𝘢𝘳𝘺𝘣𝘢𝘭𝘭𝘰𝘴 𝘺 𝘢𝘭𝘢𝘣𝘢𝘴𝘵𝘳𝘰𝘯).

 

Alabastrón etrusco-corintio de figuras negras, Atribuido al grupo de Michigan, Siglo VI a.C. 17,3 cm 

 

Estilos de decoración

La cerámica griega puede clasificarse principalmente en cuatro períodos estilísticos:

  • Protoeométrica. En esta etapa los artesanos pintaban círculos, triángulos, líneas onduladas y arcos sencillos sobre la cerámica.

  • Geométrica. La vasija era adornada con líneas horizontales, triángulos, círculos y formas en zigzag que envolvían todo el cuerpo del jarrón o, más adelante, con motivos, como el antiguo símbolo religioso de la esvástica.

  • Cerámica de figuras negras. Los pintores solían ilustrar las vasijas con escenas de la mitología griega y figuras posando para mostrar sus movimientos, desde escenas de lucha hasta danzas. Las figuras se pintaban de color negro.

  • Cerámica de figuras rojas. En esta etapa, los artistas, en lugar de rellenar las figuras en negro, empezaron a delinearlas con un fondo negro, dejando las figuras en blanco (es decir, en el color de la cerámica, rojo). De este modo los pintores lograban una mayor precisión en sus personajes, desde las diferentes expresiones faciales hasta los detalles de la ropa. Los artistas también pudieron representar complejas escenas cotidianas con mayor perspectiva y figuras superpuestas.

 

Kylix ático de figuras rojas, decorado con un personaje masculino alado, probablemente Eros.

 

 

 

Ir arriba